Por desgracia estamos viviendo lo
nunca antes ocurrido, el intento por privatizar algo que tanto nos ha costado:
nuestro derecho a tener una SANIDAD PÚBLICA.
La mayoría de la gente
(sanitarios y no sanitarios) está totalmente en contra de esta nueva medida
política y lo está demostrando día tras día por medio de manifestaciones,
encierros, huelgas… con los que pretenden conseguir poner fin a esta
idea desmesurada.
La gente se ha hartado de está
situación y ha decidido luchar por ella hasta el final, cueste el esfuerzo que
cueste, ya que estamos hablando de un derecho que tenemos todos como ciudadanos.
Tanto es el esfuerzo que están
haciendo, que para apoyar a las miles de personas que han decidido hacer huelga y
que, por tanto, están perdiendo su sueldo en estos momentos tan “críticos” para
la economía española, se están recogiendo “cajas comunes” en las que cada
trabajador deposita una determinada cantidad de dinero que servirá para
devolver, en la medida de lo posible, el dinero que están perdiendo muchas personas al negarse
a prestar sus servicios.
Estoy gratamente satisfecha con
el esfuerzo que millones de personas están realizando día tras día para
intentar conseguir poner fin a la
privatización.
Creo que es la primera vez, que
prácticamente la mayoría del personal sanitario está de acuerdo en llevar a delante
las medidas necesarias para frenar está situación.
Evidentemente, también existen
personas que están a favor de está nueva reforma y que no están participando en
la huelga, pero eso es algo normal, que todos debemos respetar.
Ahora bien, ¿qué papel tienen en
esta huelga los miles de estudiantes que día tras día van a centros de salud y
hospitales para hacer sus prácticas? ¿Pueden negarse los servicios mínimos a
tutorizar alumnos?
Existen muchas universidades que
no permiten realizar huelga a sus alumnos a pesar de pertenecer al ámbito
sanitario. Esto me parece un error gravísimo por muchos motivos.
Primero, estamos asistiendo a las
prácticas en lugar de apoyar la huelga, algo que por desgracia nos va a afectar
a todos, no sólo como posibles pacientes de la sanidad pública, sino también,
como futuros trabajadores en poco tiempo.
Si que es verdad que en algunas
universidades permiten a sus alumnos hacer huelga si después recuperan, durante
el fin de semana, el día perdido. ¿Qué opción es esa? Muchos alumnos trabajan,
tienen otras cosas que hacer y no tienen posibilidad de recuperar los días
durante el fin de semana, por lo que no les dan mucha opción para decidir si hacer
huelga o no.
Lo justo sería dejar que fueran
los alumnos quienes decidieran si hacer o no la huelga, asumiendo que van a
perder un día de aprender (que al fin y al cabo es para lo que estamos allí y
lo realmente importante) y no fijándonos en sí vamos 7 horas menos en total a
las prácticas.
Con respecto a sí los enfermeros
pueden o no negarse a tutorizar alumnos durante la huelga, muchos enfermeros si
que lo han hecho y los alumnos, durante ese tiempo, se han quedado en un cuarto sentados sin hacer absolutamente
nada.
Evidentemente estoy totalmente de
acuerdo con que el personal sanitario haya tomado esa decisión, puesto que si
están de mínimos, la parte docente no es explícitamente necesaria llevarla a
cabo, pero mi indignación es: ¿no sería mejor dejar que los alumnos hagan la
huelga, defiendan sus derechos y, encima, no pierdan su tiempo sin poder hacer
ni aprender nada?.
Creo que con nuestra asistencia a
las prácticas estamos “boicoteando”, por decirlo de alguna manera, el esfuerzo
de todos los trabajadores por intentar defender sus derechos, deberíamos estar apoyándolos ya que nosotros también formaremos parte de los millones de personas afectadas por esta medida.
¿Qué nos pasará cuando nos
pongamos malos y tarden tanto tiempo en hacernos las pruebas necesarias que sea
demasiado tarde? ¿Qué pasará cuando tengamos que pagar por recibir algún
tratamiento y no lo podamos hacer porque no tengamos dinero? ¿Merece la pena,
como enfermera, hacerme responsable de la salud de los pacientes por un sueldo
tan bajo?
Espero que al leer estas
preguntas, todos y cada uno de nosotros reflexionemos sobre la situación en la
que estamos actualmente, tomemos consciencia de ello y salgamos a la calle a
unirnos con el resto de personas que están luchando porque el día de mañana
tengamos a alguien que nos atienda cuando nos pongamos malos y nosotros, como
estudiantes, sigamos teniendo la
posibilidad de aprender, como lo hemos hecho en está planta.
Gracias por todo lo que nos
habéis enseñado día a día, ha sido una experiencia muy buena, que me ha ayudado
ha enriquecerme no sólo como enfermera sino como persona, he conocido gente
maravillosa y he podido aprender a entender mejor y de otra manera, la situación
tan angustiosa que familia y paciente sufren en los momentos más críticos de su
salud.
Me parece perfecto.
ResponderEliminarEspero que disfrutaras la rotación por la UCi, cualquier cosa que necesites y yo pueda solucionar, no dudes en pedírmelo.
un abrazo.